Qué ver en Seúl, tercer día
Hoy toca ronda de palacios. Visitaremos el Gyeongbokgung, con su puerta Gwanghwamun donde ejecutan el cambio de guardia. Cogemos un taxi tras desayunar estos cafés ricos para llevar y por 3.500 won nos plantamos en la puerta.
Traspasamos la puerta del palacio ( se entra por un lateral) y llegamos a la puerta principal. Recorremos el recinto viendo:
Maqueta del palacio y mobiliario:
Puerta lateral:
Puerta Gwanghwamun:
Alrededores del museo oficial del palacio :
Compritas en tienda oficial del museo
Museo folk
Palacio de agua
La portada del blog es el jardín principal con sus preciosos nenúfares que se asoman curiosos:
Como en cualquier ciudad grande que se precie también tienen su peculiar cambio de guardia:
Ya cansados bajamos por la avenida principal donde se concentran edificios gigantescos, embajadas y demás Museos..
Vemos las imponentes estatuas que la preceden y caminamos hasta llegar al ayuntamiento.
Llegamos a un parque donde dejo a mis aitas descansando porque ya están saturados de templos y palacios. Yo me acerco a Deoksugung. Me cruzo también con este bolardo simpático y esta curiosa estatua.
Está cercana al museo de historia.. me despisté y me fui para otro sitio. Menos mal que finalmente encontré mi destino.
Esto que veis es un museo de pintura al cuál pasabas pagando entrada adicional.
De ahí voy a buscar a mis padres y cogemos un taxi a la zona comercial de Dongdaemun (6200 won). En esta ciudad hay bastante tráfico a todas horas. Pero la conducción de los taxistas es bastante ágil. Llegamos y nos deja enfrente del Estadio que tiene una forma muy peculiar. Entramos en un centro comercial y otro llamado Lotte que nos recomienda el taxista. Los precios del primer centro (justo enfrente del estadio) son carísimos y los del otro baratos pero hay muchos zarrios. Está todo amontonado y la sensación de los pasillos es agobiante. Nos decepciona bastante porque en teoría aquí podías encontrar gangas y buenas imitaciones..no veo nada decente. La zona es inmensa y te puedes perder porque la vista no alcanza a ver el fin de los edificios conectados entre sí y repletos de todo tipo de mercancías.
Buscamos un sitio para comer pero no encontramos. Se empieza a nublar y nos cae de repente el diluvio universal. Nos refugiamos en el Café Cupple que hace esquina y tomamos por 11.300 un nestea, una coke y un zumo. Esta zona abre las 24 horas y recomiendan venir a media tarde.. la verdad que hemos venido pronto pero parece muchas tiendas cerraban ya..
Ahora intentamos parar un taxi y nos cuesta un triunfo. Volvemos al hotel (10.300 won). Comemos en el hotel y yo me escapo a ver el palacio Jongmyo Srine. Llego por los pelos porque la última visita ha salido ya y les ruego echar un vistazo. Me acompaña el guardia de la entrada a un grupo japonés con el que me aburro como una ostra. El templo no es muy vistoso, he de decir que al llover se han puesto nubes que han quitado luz y la visita la catalogo como triste. De hecho me acabo escapando y juntándome a un grupo que salía.
Vamos a un super cercano y por 3500 won compramos plátanos. Vemos las comidas típicas, vemos el vino que beben de arroz ( tipo sake) y demás curiosidades. Además los dueños son muy simpáticos. De vuelta paramos en Innisfree y compramos cremas por 80.000 won. Fin del día
22/06/16