Qué ver en Cochem
2/5/17
Cogemos un tren a Koblenza desde la estación de trenes central. El tren viene con algo de retraso. Pasamos por pueblos muy chulos como Andernach, me voy apuntando los nombres según veo el paisaje. Llegamos a Koblenza y por error nos bajamos en la estación anterior a la central. Como el tren iba con retraso andamos justos para coger el otro tren. Cogemos un taxi que nos cuesta 5 euros y llegamos a coger el otro tren por los pelos. Qué nervios se me han puesto!
Pasamos ahora por pueblos como Niningen, Läf, Kovern-Gondorf, Mosel.. todos son preciosos, vemos puentes de piedra, fortalezas, casas preciosas… Estos pueblos en verano tienen que estar abarrotados de gente porque se ven muchas caravanas y bungalows apostados a orillas del río. Tras un buen rato llegamos a Cochem. El trayecto total unas tres horas. Al bajar del tren preguntamos por la oficina de turismo y nos indican todo recto. Seguimos el cauce del río y nos topamos con ella. Cogemos un plano y nos habla de subir al castillo en transporte, de coger un teleférico, de un museo de la mostaza y de un crucero por el río.
Vemos un tren turístico , el paseo cuesta 5,30-euros. Paseamos las calles que son preciosas y nos parece entrar en un cuento de los famosos hermanos Grimm. Vemos una torre medieval Enderttor.
Cercano tenemos un panel lleno de colores que es una verdadera obra de arte. Tras andar un rato llegamos a la plaza del ayuntamiento. Es espectacular.
Tras hacer varias fotos cogemos un bus para subir al castillo Reichburg, andando cuesta unos 20 minutos y es cuesta arriba. Como el tiempo es justo decidimos subir en bus. Si compras el billete de ida y vuelta sale por 4-euros, si compras sólo ida sale 2,5-euros. Como somos un poco vagos por naturaleza compramos ida y vuelta aunque sólo lo utilicemos al subir. Llegamos al precioso castillo y vemos en unos carteles que las visitas son guiadas y se ofrecen cada 40 minutos. Visitamos las distintas estancias del castillo y nos acompaña una guía muy simpática, pero sólo hablan en alemán. El castillo está muy bien conservado y por fuera es una preciosidad. La guía nos da algo de información en una hoja en castellano y podemos ver cómo este castillo al igual que muchos de las orillas del Mosela fueron destrozados por los franceses en 1689. El castillo es construido alrededor del año 1000 y luego se reconstruyó después del paso de los franceses. En una de las habitaciones hay colgando unas estatuas voladoras con forma de mujer y tripa regordeta. Se supone hay que tocarlas con los ojos cerrados y pedir un deseo.
Tras terminar la visita vemos las vistas y hacemos varias fotos.
Nos vamos al pueblo andando y paseamos varias tiendas. Me compro un bolso y una cazadora. Comemos un Curry wurst en un puesto donde la chica habla un poco de castellano. Cruzamos el puente y paseamos un poco más. Adelantamos la hora de partida cambiando el billete en la estación de tren y volvemos a Colonia. Paseamos la calle comercial principal y vamos a un Lidl, compramos para cenar y nos vamos al hotel para descansar.
Ha merecido la pena la paliza de viaje porque los paisajes son increíbles y ya hemos visto el segundo pueblo más bonito del mundo!