Salinas de Añana, Salinas de Leniz y Antezana
27/01/19
Hoy salimos de escapada por Alava. Una ruta bonita por las salinas y visita artística en Antezana.
Salinas de Añana
Llegamos en aproximadamente 30 minutos desde Vitoria al famoso Valle salado de Añana. Aparcamos el coche y nos dirigimos a un centro que tienen de donde salen las visitas. Los domingos tienen visita guiada de una hora de duración. Recorremos la zona viendo los secaderos más antiguos, los más nuevos y contemplando ese paisaje salado.
En la tienda se puede comprar todo tipo de sal, con curry, con tomate, en escamas, líquida en spray… y diversos souvenirs salados.
Salinas de Leniz
Aquí nos dicen que la diferencia de sacar la sal con la de Añana es el método de carbón. Al parecer calientan con carbón en vez de secarla al sol.
El pueblo tiene mucho encanto y a pesar de que hace malo recorremos un poco sus calles viendo esos arcos de piedra que le dan un toque medieval. También vemos la fuente de la iglesia con muchos caños y la torre de la iglesia que es preciosa.
Comeremos en Arrate, un restaurante que a pesar de que no ponga precios en la carta cocinan fabulosamente y nos saca por unos 40-euros/persona un menú degustación exquisito consistente en: alubias con sacramentos, marmitako con bogavante, garbanzos con pochas y arroz con bogavante. De segundo txipirones y chuletón. De postre milhojas, tarta de manzana exquisita y tarta de queso. Todo buenísimo y la atención superior.
Antezana
Este pueblo está muy cercano al aeropuerto de Vitoria y merece sin duda una visita. Al parecer es un pueblo del año 1050 según data en los archivos de San Millán de la Cogolla. Vamos a hacer una visita guiada que acostumbra a ser los domingos a las 12 con Aintzane, una residente que nos explicará los murales pintados de la iglesia. Esta iglesia data del siglo XVI, y en 2005 se cayó una piedra de la cúpula que hizo que se plantearan una reforma. Como no tenían dinero un arzobispo desinteresadamente les donó una cantidad de 3000-euros y Xabier Egaña se ocupó de pintar los murales. Xabier es un franciscano que luego se casó y tuvo dos hijas. Su obra se caracteriza por su colorido y sus formas cuadrangulares donde enmarca las escenas.
La iglesia tiene un retablo barroco y por detrás están las pinturas originales de la misma que se ven si te asomas por una de las puertas. En el altar está la virgen de Armola que es románica y su característica es su redonda cara de campesina.
Este pintor tiene influencias de Picasso, de Matisse, de Munch, hace homenajes en esta obra a Oteiza, a las famosas manos pintadas en una cueva muy famosa de Chile, al campo de concentración de Auswitch, pinta la dormición de la virgen, la Venus de Willendorf que se supone apareció hace 30000 años en el Danubio, hace homenaje a la naturaleza al revés y hace mención a una historia muy bonita de Férida la mujer ahorcada.
Un artista que no conocía y me ha sorprendido gratamente.
En Antezana podemos descubrir en una de sus casas un jardín mágico. Hay un artista escondido cerca de la plaza de la iglesia. Su casa le delata porque la entrada está pintada con colores sus árboles de la entrada están decorados como el bosque de Oma. Si visitas el interior encuentras obras de arte que decoran su espléndido jardín. Tuve oportunidad de conocerle y adentrarme en ese escenario y de ello os dejo muestra. Si alguien está interesado en alguna escultura podéis poneros en contacto con él en el teléfono 699 58 99 36, Gabriel Ortíz de Zárate se llama el autor.